Esta es una semana en la que impera el fervor, es la semana grande para los creyentes, los cristianos
rememoran día a día, paso a paso, mejor dicho trono a trono, todo cuanto aconteció en aquellos días intentando ser un fiel reflejo mostrándolo por las calles de nuestros
pueblos. Las Cofradías y Hermandades se esmeran en lucir las mejores galas para sus imaginerías y se encomiendan a Dios, para que tras esperar un año puedan hacer
su estación de penitencia.
Aunque muchas veces se pierde la cronología y hay un cierto desajuste, lo cierto es que la Semana
Santa empieza con el Domingo de Ramos, mostrando la entrada triunfal en Jerusalén de Jesús como el Mesías, el Salvador, sobre un asno con ramas de palmas esparcidas
sobre el camino, para ser proclamado por la multitud como el Rey de Israel.
En Benalmádena también se convierte este domingo en un día grande con la participación masiva de
su gente, quien ataviada a la usanza de entonces salen y recorren sus calles con espíritu festivo y reviviendo aquellas escenas.
Foto de Manu Cantero en Fotocall
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Foto de Manu Cantero en Fotocall
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Aquí
Manu Cantero captó esta instantánea del burro o la pollina
con un perrito faldero sobre su lomo, no hay dudas que formaban parte de cuanto acontecía, aunque si nos ceñimos a la simbología, por otra parte tan importante en
cualquier iglesia, de cualquier religión, esta foto da mucho que pensar porque sin representar a nadie, podría considerarse ofensivo si uno quiere, y por otro lado
sin embargo ser representativo y darle un toque de humor o de ironía,
Foto de Manu Cantero en Fotocall.
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es una dualidad muy casual, o muy circunstancial, hasta si alguien quiere muy normal, como normal
es esa expresión que alguna vez hemos escuchado de "no seas burro" aunque se pueda echar lo que quiera a lomos, aunque sea un perro que mueve su cola mientras ladra
sintiéndose la figura estelar de la representación callejera, aprovechándose de la fortaleza del burro.
Pero ni el burro ni el perro, que aquí podríamos considerar "atrezzo", nos interesa. Nos interesa Jesús que compartió la Santa Cena con sus seguidores más
cercanos seguidores incondicionales reflejado en "Il cenacolo" o L’ultima cena que tan magníficamente nos muestra la obra de Leonardo da Vinci con esa pintura en un
mural original que ejecutó entre 1495 y 1497 y se encuentra en el refectorio del convento dominico de Santa María delle Grazie en Milán (Italia) siendo considerada
como una de las mejores obras pictóricas del mundo. Una Última Cena que también ha representado en sus pinturas Francisco Ribalta (1606) y en su obra escultórica
Francisco Salzillo en el año 1763.
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Nos interesa Getsemaní-Huerto de los Olivos cuando Jesús comenzó a entristecerse y angustiarse
diciéndoles a los suyos quedaos aquí y velad conmigo.Sus discípulos dormían una, dos y hasta una tercera vez.
Levantaos, vamos; ya llega el que va a entregarme. Aún
estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los doce, y con él una gran turba, armada de espadas y garrotes, enviada por los príncipes de los sacerdotes y los
ancianos del pueblo. Judas acercándose a Jesús, dijo:
salve, Rabbí. Y le besó. Jesús le dijo:
Amigo, ¿ a qué vienes? Entonces se adelantaron y echaron las manos
sobre Jesús, apoderándose de Él. Y vino la escena de la oreja cortada y su frase
"Vuelve tu espada a su vaina, pues quien toma la espada, a espada morirá".
Foto de Manu Cantero en Fotocall
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Hoy es Lunes Santo, y Jesús terminó cautivo, "¿ Como a ladrón habéis salido con espadas y
garrotes a prenderme? Todos los días me sentaba en el templo para enseñar, y no me prendisteis". Fue juzgado y se lavaron las manos para terminar crucificado, le
pusieron con mofa una corona de espina como rey, le clavaron una lanza en un costado y expiró en el monte Golgota o Calvario como le llamaban, proviniendo su nombre
por la forma de calavera que tenían las rocas de una de sus laderas. Allí encomendó al Padre su espíritu y exclamó «¡Dios mío, Dios mío! ¿por qué me has abandonado?.
Murió y resucitó al tercer día. Ahí esos pasos con una cruz desierta de los Jueves Santo procesionándose en
el silencio de la "madrugá", o del Santo Entierro y Viernes Santo para llegar a La Pascua, también llamada Pascua Florida, Domingo de Pascua, Domingo de Resurrección
o Domingo de Gloria. La Pascua marca el final de la Semana Santa, en la que conmemoramos la crucifixión y muerte de Jesús.
A la Semana Santa le sigue un período de cincuenta días llamado Tiempo pascual, que termina con el Domingo de Pentecostés.
Y ser cristiano no se es de una semana, ni de unos meses, sino de todos los días, y aunque uno no multiplique panes ni peces tiene en su mano la caridad y la generosidad para
quienes más lo necesitan.
Seremos aclamados alguna vez, compartiremos momentos inolvidables e intentaremos, lo consigamos o no,
hacer un poco más felices a los que nos rodean, nos besarán traicioneramente la mejilla y seremos juzgados, pagaremos nuestras culpas, no seremos crucificados
ni resucitaremos al tercer día, y quien sabe si iremos a los Cielos.......
Solo nos queda ser llorados y no olvidados........
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© "Los niños de Juan Manuel" - Junio 2009"